A menudo suelen confundirse estos términos, suponiendo que son sinónimos, sin embargo, aunque coinciden en el propósito, difieren en su objetivo.
En este artículo trataremos de explicar la diferencia entre ambos conceptos y un ejemplo para comprender el objetivo de cada uno.
El marketing con causa se define en términos generales como «cualquier esfuerzo de una empresa por aumentar sus propias ventas contribuyendo con los objetivos de una o más organizaciones no lucrativas» (Adkini, 2014).
Es una herramienta que se vincula de muchas maneras con la Responsabilidad Social Empresarial, pues actúa como una excelente forma de expresar el compromiso de la empresa responsable ante la sociedad.
Se entiende como «una actividad comercial basada en una relación de colaboración entre la empresa, una organización no lucrativa y/o la causa, con el fin de promocionar una imagen, un producto o un servicio, en beneficio mutuo».
El marketing con causa le permite a las empresas contribuir a una causa social concreta, a la que asocia su imagen, productos o filosofía. Por lo genera lo aplican las empresas para incrementar ya sea la venta de un producto o servicio, o en beneficio de su imagen.
Desde el punto de vista de las empresas, es posible afirmar que las acciones de marketing
relacionadas con causas sociales hacen posible no solo el aumento de la notoriedad o la mejora de la imagen corporativa, sino también el aumento de la posibilidad de generar nuevos negocios lo que, por consecuencia, tiende a resultar en el aumento de las ganancias a largo plazo. En otras palabras, la empresa le da énfasis a lo que se puede llamar filantropía estratégica.
Y es que son cada vez más los consumidores que prefieren a unas marcas de otras por atender problemas sociales o por prácticas en beneficio una problemática específica. Estas prácticas no solo mejoran la imagen de la empresa sino también crean vínculos más profundos con sus seguidores.
Un ejemplo de este tipo de estrategias es la marca de zapatos Toms, que en términos generales se basa en “compra uno y dona uno”; cada vez que un cliente compra un par de zapatos de esta marca se dona uno a comunidades vulnerables.
“Todos los negocios exitosos son acerca de la gente”. Una compañía con propósito es una mejor empresa y convierte a la gente en su más fiel aliado – Mycoskie fundador.
Mycoskie considera que cada comprador se convierte en un donante de su causa y un filántropo, y promociona sus productos con la frase ‘ayúdanos a cambiar el mundo’. Considera que el calzado hace una diferencia decisiva en la vida de estos chicos. TOMS shoes ha entregado más 140.000 unidades a chicos en distintos lugares del mundo.
Por otro lado, el marketing social…
El marketing social puede ser aplicado tanto por empresas como por organizaciones y gobiernos, pues el objetivo principal es transformar hábitos de pensamiento, actitudes y comportamientos sociales.
El fin es generar conciencia en los consumidores; persigue el cambio de la sociedad, la mejora de las condiciones de vida de los grupos o las personas y éste es el objetivo único y último de la acción de marketing.
Un ejemplo de este tipo de estrategia es la que realizó el gobierno de Francia, a través de una tecnología interactiva en las calles de París como parte de una campaña que pretende crear conciencia sobre la importante de respetar las señales de tránsito y evitar los accidentes fatales ocasionados por no obedecer la luz roja de los semáforos.
«No corras el riesgo de mirar a la muerte a la cara», es la leyenda que acompaña las fotografías capturadas y que gobierno instaló para prevenir este tipo de accidentes ya que 4 mil 500 peatones sufren accidentes cada año en Francia.